– Formar un equipo multidisciplinar
El primer paso es constituir un equipo de trabajo que incluya representantes de todas las áreas involucradas en la producción alimentaria, como producción, calidad, mantenimiento y logística. Este equipo será responsable de desarrollar, implementar y mantener el plan
– Describir el producto y su uso previsto
Es fundamental elaborar una descripción detallada de cada producto, incluyendo ingredientes, procesos de elaboración, condiciones de almacenamiento y vida útil. Además, se debe identificar el uso previsto por el consumidor final, considerando si el producto será consumido directamente o requerirá cocción.
– Elaborar un diagrama de flujo del proceso
Se debe crear un diagrama de flujo que represente todas las etapas del proceso de producción, desde la recepción de materias primas hasta la distribución del producto final. Este diagrama servirá como base para identificar los peligros potenciales en cada etapa.
– Realizar un análisis de peligros
En esta etapa, se identifican y evalúan los peligros biológicos, químicos y físicos que pueden afectar la seguridad del producto en cada etapa del proceso. Se deben establecer medidas de control para prevenir, eliminar o reducir estos peligros a niveles aceptables.

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